martes, 5 de junio de 2012

Cuarenta y nueve

M.B.C. les dijo que lo podían llevar preso, pero que se llevaba consigo el libro, que era un arma que los policías no sabían usar, que todo con lo que los atacaría sería con la palabra y vaya que se habían encontrado con un maestro. Mientras le ponían las esposas se mofaron de él en tres tiempos: primero le dijeron que era maravilloso que tuviera barba y bigote y cabello largo, que entrando se lo cortarían para ver si no se le caía lo intelectual, segundo hacían fintas para golpearlo con el libro como si fuera macana (le decían que los ignorantes sabían darle uso o cualquier cosa inútil) y tercero, iban a ese cliché: Tú que eres poeta y en el aire las compones...

2 comentarios:

Javier Munguía dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Javier Munguía dijo...

Alfredo: soy Javier Munguía y hasta hace unos minutos era uno de tus contactos en Facebook. En un arrebato, me has eliminado y bloqueado en la red, de modo que no he podido aclararte el incidente. No borré ningún comentario tuyo, como habrías podido comprobar si hubieras revisado de nuevo la nota en cuestión. En ocasiones, Facebook oculta comentarios y luego los muestra. Quizá eso propició tu confusión. He tenido intercambios más ríspidos que el que sostuve contigo, y ello no ha sido motivo para eliminar al contacto o censurar sus comentarios, excepto cuando se trata de insultos o agresiones inadmisibles. No tendría necesidad de venir a mentir a tu blog: si hubiera eliminado tu comentario, lo asumiría. Espero que el caso quede aclarado. Un saludo cordial.